Las ventajas de andadores para personas mayores

La vejez lamentablemente nos trae  muchos riesgos nuevos  a nuestras vidas. Unos de ellos son causados por la debilidad general y la disminución de la condición física en los ancianos.

Para las personas mayores los desafíos de la vida cotidiana adquieren un significado diferente, aparecen más y más dificultades incluso con una actividad tan normal como la de moverse. Esto no significa que los ancianos estén condenados a estar encerrados en el hogar y a no participar en la vida cotidiana.

Andadores, caminador de rehabilitación, ¿para quién?

Para todos.  Es la mejor respuesta, y la más precisa. Por supuesto, hablamos aquí  sobre personas de todas las edades que tienen lesiones graves y necesitan algo de tiempo y trabajo para volver a estar en buena forma física, y no quieren estar condenados a la pérdida de movilidad. Aunque debe admitirse que, en tales casos, las personas más jovenes, que necesitan rehabilitación, usan más a menudo muletas u ortesis, y con menos frecuencia andadores. Los andadores de rehabilitación están es el reino de las personas mayores.

Y no deber sorprendernos.

Para los ancianos, un andador es una solución mucho más cómoda porque proporciona a los adultos de tercera edad una mayor estabilidad de movimiento, así como menos fatiga a la hora de andar distancias un poco más largas.

Andador de rehabilitación, ¿son sólo ventajas?

En teoría, para una persona mayor, una silla de ruedas, especialmente una eléctrica, sería una mejor solución para moverse en la vida cotidiana. Pero, ¿estás seguro? La silla, aunque tiene muchas ventajas, puede hacer que el usuario se vuelva perezoso y renuncie a cualquier tipo de ejercicio. El andador no solo hace que sea mucho más fácil moverse, sino que también nos obliga a movernos y al esfuerzo físico, lo cual tiene un buen efecto para nuestro cuerpo y el bienestar general.

Una persona mayor, una vez que escoja moverse en silla de ruedas, tiene ya pocas posibilidades de volver a caminar, mientras que el andador aporta la misma seguridad aunque menos comodidad,  pero, en realidad, mejora la calidad de vida, mejorando la salud.

Lo mismo se puede decir cuando se compara el andador con muletas ortopédicas: el andador brinda mucha más seguridad y ayuda a las personas con problemas de equilibrio. Actualmente en el mercado hay una gran selección de andadores y puedes ajustar el producto de acuerdo con tus necesidades y preferencias.

Por supuesto, para que el anciano esté contento con el andador es necesario elegir el dispositivo correcto.

• Es necesario comprar un andador adecuado a la altura de la persona que lo utilizará.
• También vale la pena ver si el andador es plegable, ya que facilitará su uso.
• El peso del andador también será de gran importancia para una persona especialmente mayor.

Tipos de andadores para ancianos

Andador estático: no hay ruedas que faciliten aún más el movimiento. Su uso requiere más esfuerzo por parte de la persona mayor. Este es un andador que debe ser arrastrado o levantado del suelo en cada paso. Moverse con él es un poco más lento, pero el riesgo de vuelco se reduce a casi cero.

Andador con ruedas: definitivamente uno de los andadores de rehabilitación más populares. Las ruedas proporcionan un movimiento muy suave, pero no es un andador para todos, su usuario no debe tener problemas graves de equilibrio.

Un andador de rehabilitación es una muy buena solución para las personas que son lo suficientemente fuertes como para no usar, por ejemplo, una silla de ruedas y desean disfrutar activamente de los encantos de la vida cotidiana. Y más, si escogemos modelo con equipamiento especial, tales como asientos, bolsas, etc.

Alternativas para mejorar la movilidad de personas mayores