A la lista de consecuencias de la falta de ejercicio regular añadiría mi perdición: las hemorroides. Es un estándar para mí, especialmente durante el invierno. En diciembre, antes de las Navidades, si no fuera por los supositorios, probablemente no podría organizar una cena de Navidad para mis hijos. El movimiento (y falta de el) afecta absolutamente a toda nuestra vida

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